¿Cómo carajo caí acá? Nosé... son esas cosas de la vida que uno no entiende con facilidad, pero las acepta... más allá de que no nos quede otra, sino porque nos gustan y nos hacen sentir cómodos y útiles.
Poco tengo que ver con esto... estudio periodismo, NO turismo. En la puta vida se me ocurrió estudiar turismo... jamás!! Soy consciente de que no puedo, no me daría la cabeza... o mejor dicho, no me daría la ubicación. Soy la mina con menos orientación en el mundo, de verdad, sin exagerar.. los que me conocen pueden dar fe de esto. Sé ir a los lugares de memoria.. como los perros. A veces me pierdo y tardo, otras llego bien, pero siempre siempre llego!
Al principio enloquecí, no entendía una goma de nada. Todo código aeronáutico, vocabulario raro, ajeno a mi léxico. Me costaba decir pax o pasajero, en vez de cliente... decir reserva en vez de venta. Toda la vida trabajé en comercio, call center, bancos... y ahora me encuentro trabajando en una agencia de turismo... nada más alejado a mi realidad. Con decirles que viajé una puta vez en avión y de Uruguay a Buenos Aires... no pasé mas de 20 minutos ahí arriba.
Lo único que dije fue: "Me gusta viajar!!!" (con énfasis y entusiasmo). Suficiente para formar parte del mundillo turístico. Me acuerdo que en la entrevista me preguntó, quien hoy es mi jefa, ¿por qué quería trabajar acá estudiando periodismo? Hay 38 respuestas distintas para dar: porque me conviene el horario, porque son pocas horas y puedo seguir estudiando, porque quiero hacer algo nuevo, porque quiero aprender otras cosas, porque quiero crecer laboralmente.... etc etc etc. Pero no! ¿Qué dije yo? Me gusta viajar. Quiero trabajar acá porque me gusta viajar (!?!?) Como si trabajar en una agencia de turismo te permitiera viajar todo el tiempo o ser nómade... que pelotuda!
Decir eso me bastó para estar inmersa en palabras tales como fares, taxes, air bag, boing, no show, low cost, bulks, block outs..... y ciento de palabras más que no entiendo, me cuesta pronunciar y no sé que mierda quieren decir.
Lo importante es que, como dije al principio, me siento útil. Un porcentaje de gente, por más mínimo que sea, viaja gracias a que mandé a emitir sus reservas. Aprendí un montón de cosas nuevas y extrañas, conocí gente... y sé decir mi nombre con un abecedario raro:
Alfa
Lima
Mayo
Alfa
