WELCOME, WILLKOMMEN, KALOSÓRISMA, BIENVENUTO, BIENVENUE, BEM- VINDO, YOUKOSO... BIENVENIDOS...

... A mi mundo, a mi espacio, a mi libertad.... A mis puteadas, a mis enojos, a mis caprichos, a mis verguenzas, a mi mal humor, a mis quedadas mal...
A mi risa, a mi vida... cotidiana.. ya vivida, olvidada y recordada,
a TODO lo que me rodea...
A vos, al mundo... hecho por hombres de carne y hueso, sentimientos y deseos... de placer, necesidades... de odio... sexo, anhelos y amor.

Entrá y leé!...

viernes, 15 de octubre de 2010

MOMENTO ZEN

Momento de meditación.

Momento de pensar, en un lugar a ciento de kilómetros de capital. Lejos de todo el ruido, el caos y la confusión mental.

A distancias enormes de edificios y gente por doquier… y tan cerca del mar.

Rodeada de verde y el sol de mi lado.

Pienso en todo lo que me pasa ahora.

Tengo sensaciones latentes en todo mi ser y mariposas llena de libertad en mi cuerpo.

Hace tiempo me encontré conmigo. Y hoy acá, protegida por la naturaleza, reafirmo esta unión eterna y vivaz.

Disfruto cada minuto de esta paz interminable. De esta soledad que no puedo compartir con vos porque no sé donde estás.

Sé que existís, tal vez en alguna parte de mí, de mi mente y mis deseos, pero todavía no puedo tocarte.

“Todo llega”, dicen por ahí.

“Ya va a llegar”, reafirman.

Y mientras espero, lleno estas líneas conmigo. Ocupo cada renglón con vida mientras como chicle sin azúcar y fumo un cigarrillo.

Ahora pensando en la nada misma.

Con pájaros de fondo y veo a la gente pasar. Pocas personas. Algunos solos como yo, otros acompañados, como quisiera estar.

Todo llega y espero.

Escapándome a la libertad cuando la espera de hace insostenible y el tiempo no pasa más.

Me escapo cuando mi chicle es asqueroso.

Cuando mi cigarrillo ya perdió el sabor… ese sabor horrible y adictivo. Tranquilizador.

Y medito.

Pienso.

Soluciono vaivenes de mis días y alegrías de mi vida sin vos.

Aguardando que llegues para que puedas sentir conmigo el mar en la orilla.

Escuchar los pájaros mientras nos quema el sol.

Te espero en mi estado Zen para que escapemos de la ciudad, comamos chicle y me convides un cigarrillo cuando me quede sin.