Empecemos por el principio.
Ayer. Día de mierda si los hay! Por Zeuss! Cero paz, cero tranquilidad, cero tolerancia, cero todo. Discutí, o sutilmente hablando, intercambié pensamientos y opiniones con algunas personas (con un tono de voz tal vez un poco elevado, pero siempre educada). Estado de ánimo: una pequeña molestia.
Después fui a cursar... otro embole más. Estado: cansada.
Finalmente llegué a casa. Fui a mi cuarto y me instalé con un vaso de jugo frente a la pc que dicho sea de paso, me la trajeron ayer. La mandé a formatear, le agregué memoria, la tunee un poco a pesar de sus 6 años de vida (Nota: me encariño con las cosas y me niego a comprar otra). Me sorprendió lo rápido que funciona y me llamó la atención, demasiado, la cantidad de programas al pedo y nuevos que tengo ahora. No sé usarlos. No sé ni pronunciarlos. Yo sólo quería uno para editar videos, otro para audios y uno de diseño, no more! Pero bueno, mejor que sobre y no que falte.... no? Por lo tanto, ayer sólo me dediqué al msn y facebook... improductivo totalmente. Estado: potus... inútil.
Me harté de mi poca creatividad nocturna y me fui a lo del bro. Sí, me invité! Quería salir de ese fucking place y siempre está mi bro cerca (o a 30 min de bondi). Últimamente lo del bro es como la taberna de Moe para mí. Ahí me siento y desahogo de cualquier forma, pero me desestreso. Volví a las 3.30 am a casa. Estado: colgadííísimaaaa.
No sé cómo, pero llegué a mi cama y dormí como un baby. Estado: R.I.P o Q.E.P.D
Hoy, me despierto.. con gritos. Como es costumbre, mi hermano se quedó dormido y mi vieja tambien. Su forma natural de despertarnos cuando pasa esto es demostrando su fuerza pulmonar, gritando. Estado: no entiendo nada.
Me estaba cambiando, muuuy lentamente, cuando me di cuenta con un simple comentario maternal, que mi vieja había vuelto a su antiguo hobbie (que pensé que había abandonado): romperme bien las pelotas a la mañana. Siempre tan oportuna al decir sus comentarios sin filtro, logró sacarme mi primer palabra del día: pelotuda. Estado: furia en potencia.
Y como si todo esto no resultara suficiente, tenía que ir a trabajar. En subte. Línea A. Si hay algo que realmente me gusta, es viajar para el orto en la linea A (?) Todos los llamados, modernamente, subtenautas, saben de lo que hablo y lo viven conmigo todos los días. Aunque hoy, fue el colmo. Tengo en mi cuerpo la huella digital de medio vagón lleno. Si me saliera una marca por cada codazo que me dieron, sería un gran moretón. La mezcla de aromas, olores corporales y perfumes, era insoportable. A pesar de estar cerca de la ventana, todos se dirigían a mis fosas nasales. Y como siempre, infaltable en estas escenas matutinas y cotidianas, el viejo pelotudo que se deja llevar a peso muerto por la masa de gente por subir, desesperada como si fuera el último vagón del día, y la vieja histérica que grita: ¡No empujen! y que esta vez, le pegaba a ese viejo pelotudo en la cabeza y este, obviamente, un SEÑOR (con mayúscula)... la puteaba. Agradable situación. Puteadas en casa... puteadas en el subte. Estado: MAL HUMOR.
Reconozco que soy medio ciclotímica, bipolar y todos los sinónimos para decir que cambio de ánimo con facilidad. Pero ojo al piojo (?) también reconozco que el mal humor no me dura mucho... hasta ahora van 19 horas.
"¡No te enojes! te vas a volver vieja rápido"... diría Nachito. Ingenuo con sus 12 años y sin haber vivido ni 1/8 de mis días de mierda. Igualmente, lo escucho. Le hago caso y hasta ahora, sin arrugas!
